Reinaldo «El Zurdo» Rengel, un jugador fuera de serie.

Selección de DF 1970

Desde la Fundación Venezuela Futbol, nos hemos planteado hacer un Reconocimiento postmorten al Zurdo Reinaldo Rengel, para los entendidos uno de los mejores mediocampistas que tuvo la Vinotinto en los años 70, surgido de la cantera del Santo Tomas de Aquino, fue selección del DF , hizo su debut con el Deportivo Galicia con el cual fue Campeón en 1974, además jugo con el Deportivo Italia y el deportivo Portugues, cabe señalar que fue protagonista de la primera victoria de la selección juvenil Vinotinto sobre la Argentina 1 a 0, en ese torneo fue el Capitan y un baluarte de esa generación, a continuación les dejamos unos testimonios de jugadores que compartieron con el en la cancha como compañeros y adversarios
Reinaldo “ El Zurdo” Rengel , un extraordinario futbolista y mejor persona . Su personalidad determinantemente guerrera, locuaz  , en el vestuario y ,sobre cualquier césped, contrastaba con su conformismo y cierta ingenuidad de enfrentar la vida.
Así lo conocí, lo había visto jugar en el profesional , con partidos donde su clase y Don de juego, determinaban el manejo del partido y la victoria lograda para su equipo, sobre todo ,cuando asimilaba correctamente la táctica grupal . Digo esto , porque como él nos decía en lo personal , su forma a veces díscola de ver el juego, traicionaba los objetivos del grupo y los resultados eran negativos.
Luego ya casi retirado de esa división , lo conocí cerca de la zona donde yo vivía en Colinas De Bello Monte , donde se juntaba a jugar Caimaneras con los jóvenes de la zona y donde se confundía como uno más , con una connotada sencillez y un amiguísimo desbordado, lo cual lo hacía una persona muy querida.

Alen Pinto, Victor Filomeno, El zurdo Rengel, Hamleth Tabarez

Tuve el privilegio de coincidir cómo compañero, con “ El Zurdo”  en los años 80, en la primera división de Lides con el Santo Tomás de Aquino y teniendo además la suerte de que su mejor amigo era Kiko Orriols, amigo mío también y, que por coincidencia ,era mi paciente en la UCV y conformamos un buen grupo deportivo y humano, donde esa dupla de veteranos , llevaron el liderazgo, donde el Zurdo , tenía siempre la última palabra , de lo que haríamos en la cancha , siempre sin romper los lineamientos que dispusieran los DT’s Carlos Ravel y el Tete Orriols .
Era una fija , reunirse en nuestro campo antes de comenzar el partido y, repetir lo que comentaba en el vestuario ,”muchachos vinimos a divertirnos y jugar bien , vamos a tocar , cero romper a menos que no haya más remedio , a tocar , se levanta la cabeza , y a tocar , más nada “ .
De allí nació una relación de amistad espectacular con el Zurdo , que creció con los años.
Nuestras conversaciones siempre fueron diversas, siendo el fútbol el tema de honor , el tema indispensable para disfrutar de horas, de buenos conceptos sobre el balompié y, conocer de él , sus frustraciones y satisfacciones , de su paso por el profesional.
Su experiencia más exquisita y que a mí , más me gustaba rememorar , la victoria sobre Argentina en aquel Suramericano de año 1971 , no sin dejarme de hablar de los empates ante Colombia , Perú, la derrota ante Brasil , pero terminábamos con ese triunfo ante la albiceleste, que además venía de derrotar a los brasileros.
En nuestras conversaciones era inevitable hablar de la situación del fútbol nacional , la época en la que le tocó desarrollarse, mucho más defectos que virtudes ,las comparaciones con las épocas del momento, donde resaltaba sobre manera la etapa Richard Páez y, muy pro activo en su momento con la llegada de Noel San Vicente , se molestaba mucho al hablar sobre los manejos siempre extraños y, de la forma cómo se cuadraban a nivel Conmebol ,los equipos , las selecciones , con niveles de conveniencia , donde Venezuela , llevaba siempre una buena dosis  de desventaja , administrativa y arbitral , sin contar las degradaciones que etiquetaban su esencia como futbolista.
En 2004 lo coloqué en un espacio , que teníamos en nuestra programación ,en el Súper Resumen Deportivo de la Semana , programa que conduje por 12 años en Radio Deporte  1590AM y, allí siempre había una conversación abierta con el invitado de todo lo que lo rodeaba como persona y deportista .Recuerdo que hubo una buena dosis emocional ,debido a que le tenía una sorpresa , que Yo sabía , que harían saltar los sentimentalismos de todos , especialmente de él y de su gran amigo Kiko Orriols , en ese momento como ahora aún , viviendo en España .
El Zurdo, se quedó conmigo hasta el final del programa , yo había quedado en llevarlo a casa  y , en el camino , no hacía más que llorar, al llegar estaba allí su hijo Reinaldo y una agradable señora , que era su tía , el Zurdo , les contó a los dos ,que había tenido un domingo lleno de mucha felicidad y que agradecía sobremanera mi gesto y atención, incluso me dijo “ JuanCarlitos, te quedas a cenar con nosotros, no hay mucho , pero nos arreglamos “. Así era el Zurdo.
En algunas ocasiones , hicimos actividades filantrópicas , tomando a los veteranos VinoTintos de la capital , como punto de referencia para captar a la población y ayudar al que lo necesitara. El Zurdo , participó en todos y siempre me recordaba , que contará con él. Así era el Zurdo Rengel que conocí,  ese que no paraba de hablar con gran orgullo de su hijo Reinaldo , de su diabetes , de sus medicaciones , de las consecuencias etc .
El fallecimiento de su hijo Reinaldo , fue el principio del fin , de Reinaldo “El Zurdo” Rengel, así lo capté en nuestro encuentro de Homenaje a los jugadores del Galicia FC. Ese no era el Zurdo que yo había conocido , más allá de su conformismo habitual , existía en su imagen un abandono preocupante.
Esa tarde me prometió que pasaría por mí consultorio, yo utilicé la excusa de que le tocaba desde hace rato una buena evaluación, realmente pensé que lo podría ayudar , sin embargo la comunicación con él , fue infructuosa, incluso con la ayuda de su hermano Rafael .
Siempre me quedaré con el recuerdo de su bondad en la amistad , detalles de ingenuidad , propia del infante soñador , eso le daba un plus de gente buena , su sonrisa ,su buen sentido del humor siempre, más su fina visión para describirte lo que sucedía en una cancha de fútbol .
Gracias Fenómeno, por tu amistad y buen fútbol.
Con absoluta sinceridad y admiración, de este humilde servidor,
Juan Carlos Álvarez .
Excelente y relevante exposición de mi estimado Juan Carlos para con nuestro querido y recordado Reinaldo «Zurdo» Rangel, por mi parte solo agregar a tan sobrio relato que tuve oportunidad de por una parte compartir dentro del campo así como experiencias de trabajo como entrenadores en  el Italo, donde al zurdo le encargaron la loable tarea de enseñanza y formación de la escuela de fútbol del Centro Italo durante un par de años y donde era un placer ver su increíble pasión con lo ragazinos por inculcarles el inmenso valor de los primeros pasos del deporte de su vida, al mismo tiempo de procurarles la respectiva diversión, así en muchas ocasiones que pude acompañárlo de regreso a su casa en Bello Monte nos reíamos a más no poder de tantas ocurrencias con los chipilines de su escuelita,  como el le decía. Otro de los momentos que nos marco nuestra amistad fue cuando tuvo que retirarse del colegio San Marcos luego de 24 interrumpidos años de enseñanza con la escuela de futsal creada por el,  motivado a que debía ir a Mérida por enfermad de su querida madre, es aquí donde bajo su  recomendación me llaman para ayudar al colegio para encargarme de la misma, es aquí donde se inician los inconvenientes de salud de su familia que converge luego con la complicación de su hijo y que posteriormente ya fue difícil tener comunicación efectiva con el, solo con su aparición en el homenaje del Galicia, gran recuerdo para un grande de nuestro Fútbol vinotinto y que siempre perdurará en nuestro corazón, gracias por siempre querido Zurdo!!
Pedro Alonso 
Reinaldo «el Zurdo» Rengel, fue un jugador que se comportó en la cancha tal cual era fuera de ella. Era caótico, impredecible, proactivo, recursivo para solucionar con sus capacidades geniales, que lindaban con sus  insólitas locuras. Disfrutaba cada acción del juego, el niño que llevaba por dentro siempre fue feliz, ya que hacía lo que le salía de su alma interior. Lo disfruté como compañero en la Selección Juvenil Sub20, en aquel Juventud de América 1971 en Asunción de Paraguay y donde le ganamos a la Argentina 1 por 0, empatamos con Perú y Colombia, una generación dorada que dejaron perder en época de cenicienta. Luchador incansable y sin límites para mejorar las condiciones profesionales del jugador venezolano. Siempre auténtico, locuaz, frenético e impredecible pero fiel, frontal y sin miedo para actuar cuando había que actuar. Gracias Zurdo Rengel mil Gracias por demostrar que hombres como Tú, sin temores, irreverentes y genios diferentes nos demostraron con hechos y palabras, lo que debiamos hacer los jugadores venezolanos para cambiar nuestra historia decadente de la cenicienta a La Vinotinto, hasta la eternidad.
Richard A. Páez Monzón

Mis recuerdos en el fútbol son muchos. Jugué siempre en el equipo Loyola, desde infantil C hasta primera categoría. Mis grandes y honrosos rivales fueron San Agustín, La Salle, Calazans y, de manera especial, el Santo Tomás. Nuestro equipo fue muy exitoso, tuvimos la suerte de contar con excelentes jugadores y de mantener siempre una gran mística, quedamos campeones del DF en todos nuestros 6 años de infantil. Sin embargo, en juvenil no pudimos ganarle al Santo Tomás, los tres años nos superaron en finales aguerridas en el estadio Nacional Brígido Iriarte. Mi recuerdo, a lo mejor me equivoco, es que al Santo Tomás llegaron dos jugadores nuevos cuando empezamos en juvenil, un moreno de gran toque e incansable perseguidor llamado Ravelo, y un zurdo muy alto, ya con chivita de candado, que se llamaba Rengel, me parecía extraño su apellido con e y no con a, que dominaba el balón de una manera superior a todos nosotros, más ninguno tenía un toque tan fino y preciso como este zurdo. Ambos jugaban en la media y recuerdo también a Juanín por el extremo derecho, pero él si jugó desde infantil contra nosotros. Los tres años del juvenil perdimos el invicto, no pudimos superar esa media cancha de Ravelo y Rengel. Al zurdo no lo conocí fuera de la cancha, pero siempre nos saludamos como buenos rivales, era un individuo con mucha serenidad en el manejo de la bola, la pisaba, se volteaba con mucha elegancia, muy inteligente en los pases, me enseñó a apreciar más ese bello baile que llaman fútbol.

Gustavo Maggi

Selección Juvenil 1970

Yo tuve una relación con el tanto personal como futbolística, fue un jugador que se superó una barbaridad  desde el juvenil en adelante, tenía algo que era muy particular en el su confianza en que era un buen jugador y lo hacía el líder del equipo, así nos lo hizo ver en los partidos que jugamos contra el Santo Tomás y las derrotas que obtuvimos de ellos, alegre, buen amigo, muy caballeroso sobre todo con las chicas. Excelente jugador, fuerte en el ataque y en el driblin era un Rivelino, fuimos buenos amigos.
Domingo Delgado Osuna, ala izquierda del Loyola juvenil 69, 70 y 71. 
A pesar de no haber tenido amistad con él. La experiencia de haber jugado en repetidas oportunidades desde Infantil B creo, nos dió la oportunidad de un trato respetuoso. En mi caso ver el crecimiento tanto físico como futbolístico fue motivo para tenerle respeto y mucho cuidado en la cancha. Admiraba de él, el inmenso coraje y pasión q ponía en cada encuentro y q lo transformaba en un líder natural en el equipo de turno. Era un jugador muy completo , inteligente y duro en el campo , sin llegar al juego  malintencionado y desleal.
Además de recordarlo como ese jugador extraordinario q llegó a destacarse incluso a nivel profesional, dejó algunos recuerdos no tan agradables en nuestra experiencia, como fueron derrotas claves en varias decisiones de campeonatos entre Santo Tomás y Loyola. Y como si no fuera suficiente la herida moral, me quedó una física en el arco superciliar derecha, luego de un cabezazo no intencional, en una final de Primera Categoría peen el Estadio de Nacional “Brígido Iriarte” de El Paraíso
Gustavo Anzola, centro delantero del Loyola juvenil 69, 70, 71. Sobre el zurdo Rengel.

Deportivo Galicia

Lo vi jugar en la selección de DF y la Vinotinto juvenil y ya era una promesa que con creces,  jugo una buenas temporadas en el profesional con su buena zurda, en ese orden de ideas quiero hacer mención que además de jugar el futbol, jugaba Beisbol y que  fue un prospecto de los Tiburones de la Guaira como Picher Zurdo y jugo en la Liga de Softbol de la Guairita
Era un personaje que no paraba de hablar y junto con Ivan Camero y William Ravelo llegaron al Deportivo Galicia como jugadores juveniles promesas del club.
Ramon Iriarte.-
Primero quiero darle las gracias por la posibilidad de hablar de la experiencia de hablar del Zurdo Rengel, les habla Carlos Maldonado , en esa época había Brasileros, Peruanos y hasta algún  portugues, casi todo el tiempo vivimos en la casa club del Portugués creo que era en los Chorros, recuerdo que el zurdo un jugador exquisito me buscaba en el campo para congeniar tuve esa dicha y  que teníamos a Valdivia un jugador peruano de connotada experiencia y a jugadores brasileros, a mi me toco debutar con 16 años en el portugues y el zurdo fue mi protector que me protegía sabiendo que  yo venia de la Lides y la verdad es que el fue uno de los que mas me ayudo en mi inicio y ese el momento que mejor recuerdo, aunque mi trabajo me llevo a otros clubes , lo recuerdo con mucho afecto y cariño, tuve la fortuna de seguir compartiendo con el , tengo que decir  siempre que fue un gran defensor y luchador del futbol Nacional y lo recordare por lo que me regalo a mi como persona en mis inicios.
Carlos Maldonado.-

Deportivo Italia

El zurdo Rengel, yo empecé a jugar en los años 80 en el deportivo Portugues y debute con Carlitos Maldonado un jugadorazo del Fútbol Venezolano, igualmente tuve un gran amigo como fue un hermano de la vida del zurdo Rengel que es kiko Orriols, fue mi padre futbolistico, siempre me recuerdo los viajes en autobus al interior y siempre se sentaba conmigo aconsejarme . como jugador fue un 10 , no se cuantas veces fue internacional con mi país pero una glora del país  fue mas que un 10, como persona fue un 13 un espectaculo de persona humilde, caritativo y jovial, no me quedan calificativos de lo mejor  que fué como futbolista y para terminar el zurdo Rengel fue una Gloria del futbol al cual estoy muy agradecido de haberme apoyado en mis inicios en el futbol profesional, lamento que halla fallecido en la orfandad y que la FVF no se haya encargado de ayudar a esta Gloria del fútbol, lamento mucho su fallecimiento porque fue un gran padre futbolistico para mí
Eduardo Regueiro

MI  AMISTAD  CON  EL  ZURDO  RENGEL

 

Este relato viene a ser como un capitulo en la vida, un pequeño recuerdo de mi amistad con el Zurdo Reinaldo Rengel, dentro del escenario futbolístico, que nos enfrentó en algunas ocasiones y en otras fuimos compañeros de equipo.

Lo conocí como adversario en diversas canchas de Futbol de Caracas: Loyola, Estadio Nacional Brígido Iriarte, Colegio San Agustín, La Salle Sebucán, Olímpico UCV. No éramos amigos, más bien siempre nos enfrentábamos en las diversas ocasiones en las que nuestros caminos se cruzaban.

La primera vez que lo vi en una cancha  yo  formaba parte del Juvenil San Ignacio, que era el equipo de los recién subidos de infantil A, pues en el Loyola estaba el equipazo que lideraban  Cara é perro Rodríguez Berrizbeitia, Enrique Fernández, Joaquín Salinas, Guayabito Guzmán, Henry León, que ese año fueron campeones. El zurdo jugó con el juvenil del S. Tomás, imagino como refuerzo pues él era infantil A,  un partido contra nosotros, que por cierto les ganamos 2 x 1 en nuestra cancha. Estaban con él, el flaco Bigott, José Antonio Díaz y recuerdo a Juanin Cantero y un pelirrojo que llamaban Zanahoria.

Finalmente estando yo en mi tercer año en juvenil, pero en las filas de UCV y  el zurdo en su segundo año en la categoría, con su Sto. Tomas, volvimos a encontrarnos.

Esta vez el ya era un líder, un referente de su equipo, rodeado por grandes promesas como, William Ravelo, Iván Camero, Gómez, Bruno, Stefano, Legorburu, Julito Portugués, Eddy Rodríguez.                                                                                        Los enfrentamos con nuestro buen equipo, clasificados invictos a la liguilla final que se jugó en el Estadio Nacional, conformado por “Cacun” Toro Betancourt, Kimba Brito, el gato Ferreira, Barboza, Mazeica, el Coruñés, Manolito Lista, el chinito Edgard y yo entre otros.

Eso fue en 1969 y por un solo error cometido en el juego dominado por nuestro equipo, Bruno con un pase del zurdo, nos hizo un gol de contragolpe, para el 1×0 definitivo.

Como dije anteriormente, ya el zurdo era el líder de su equipo, a pesar de que el capitán era Iván Camero. Pero el verdadero referente y motor del Sto. Tomás era el zurdo Rengel.

Ese año ellos quedaron campeones, sub campeón el San Agustín de los morochos Alvarez y el catire Acosta, terceros nosotros la UCV y cuarto el Loyola. Después de esa  liguilla, el formó parte de la selección de D.F. que viajo a Mérida y enfrento en la final al equipo local, conformado por otra constelación de jugadores liderados por Richard Páez, junto a Marquina, Téllez, Mono Rivas, Briceño, Tello Salazar  entre otros. La final fue ganada por Mérida, convirtiéndose en Campeón Nacional Juvenil del año 1969, lo cual repetirían al año siguiente.                                                                                                                                       1

Aquí en Caracas, a final de año volvimos a enfrentar al Sto. Tomás liderado por el zurdo, en dos ocasiones, en la Copa Ramón Utrera.

Allí si lo vi como el capitán del Sto. Tomás. Jugamos una final y empatamos a cero goles en la cancha del San Agustín y el zurdo hizo muchos malabares y jugadas personales que lo destacaban en el grupo. Su irreverencia, apoyada en su fina técnica y la ventaja como zurdo (dicen que los zurdos son difíciles por esa condición, léase, los boxeadores, los pitchers y hasta los futbolistas no escapan de esa versión).

El tenía una jugada o mañita que imagino se la quitaron en el profesional, que consistía en dominar repetidamente el balón en medio del partido, con razón o sin razón. Lo cierto es que eso ofuscaba a los contrarios y muchas veces como en nuestro caso, al entrenador que teníamos en ese momento, que no era Soler, quien estaba de viaje al Perú. Lo cierto es que el DT encargado en ese momento, gritaba desde la banda: denle un leñazo a ese flaco para que respete, je, je, je, obviamente en esa época no se utilizaba lo del “Fair Play”. No obstante, el zurdo repetía ese acto de magia cada vez que podía y/o quería.

Ese espectáculo recordaba algo que hacíamos todos los que nos gustaba el fútbol a esa edad, es decir, cuando caimaneábamos en el patio del colegio o en la calle frente a nuestras casas, tomábamos unas peloticas de goma, como de 5 cms de diámetro, que por cierto costaban un real en aquella época  y hacíamos competencias de dominio, para ver quien la mantenía más tiempo sin tocar el piso. Eso le daba a uno, cierto dominio, que luego con el balón grande se reflejaba en un buen manejo del mismo. Yo personalmente, que no me caracterizaba por ser un jugador pausado y con toque fino, dominaba bastante bien el balón, gracias a la pelotica.

Lo digo porque lo mío era un fútbol más Loyolero de esa época, es decir, con influencia vasca, fuerza, coraje y velocidad.

Me contaron, que el zurdo era muy bueno en beisbol y pudo haber probado con los Tiburones de La Guaira, pero como dice el refrán, lo que es del cura va para la iglesia y el fútbol lo absorbió de por vida.

Así que el zurdito, como buen chamo criollo y caraqueño, le metía a la pelotica de goma, al tres rollings y un fly, al beisbol Caribe y evidentemente era un fenómeno en chapita, juego que todos o casi todos los venezolanos llegamos a jugar en esa edad infantil y adolescente, con un palo de escoba y sus respectivas chapitas de coca cola, je, je, je.

Del Juvenil, campeonato que vuelven a ganar el siguiente año, hablamos de 1970, no pasa directamente al profesional, hizo una pasantía en La Salle Tienda Honda, junto a William Ravelo e Iván Camero.  Volvimos a encontrarnos en el Olímpico dos veces, La Salle vs UCV y nuestro equipo se impuso en ambos choques.  Éramos un equipo curtido, con jugadores veteranos en primera, como Arozena, Urquizu, G. González, Coronel, Lelio, Soler hijo, Pirro, junto a los juveniles recién subidos como yo, Seara y  Pepe.                                           2

La Salle no tenía la fuerza suficiente para apuntalar a los chamos recién ascendidos, aunque en ese equipo recuerdo a buenos jugadores, como, Crispín, Polvorita, Ángel Gómez, el gordo Márquez, Montouto, De Paz, Cortizo, Sieiro y Chemary. Buen equipo, pero sin la veteranía y jerarquía de la UCV. Esto ya era el torneo distrital de primera del año 1971.

De aquí pasa el zurdo al Galicia, junto a Ravelo e Iván Camero y arranca su andar por el futbol  de la Li Mayor, jugando también posteriormente con el Dvo. Italia y el Dvo. Portugués.

Paralelamente su accionar en la vino tinto no pasaba desapercibida, era una fija en las selecciones de Venezuela durante esos años.

Poco puedo yo referir acerca de su paso por el profesional, salvo que seguía mostrando su jerarquía y maestría en el medio campo, cada vez que entraba al Olímpico.

Finalmente, nos encontramos después de muchos años, en la categoría Veteranos, específicamente en la Liga del Círculo Militar, esta vez yo con UCV Veteranos y el con  Egresados UCV. Era el futbol de veteranos, recreativo y de esparcimiento, pero que no descartaba los grandes enfrentamientos y rivalidades, que nunca pasan de largo.

Terminamos jugando juntos en Egresados UCV, donde conformábamos la Triple” R”, entre Ricardo Rodríguez (Ricky), Rafa Sifontes (Rafa) y Reinaldo Rengel (Rey), quedando campeones en dos oportunidades.

En los noventa  lo invite a jugar en UCV Veteranos en otra liga, a raíz de la desaparición de Egresados UCV en la liga de Fuerte Tiuna.

Aquí realmente cultivamos una buena amistad. Todas las semanas jugábamos en el Olímpico y cuando nos tocaba ir a Valle Fresco, Fray Luis, Izcaragua, etc., nos íbamos juntos, con el infaltable Marco Mariño “Ratón”.

Fueron unos cuantos años compartiendo juegos, traslados, momentos y muchos terceros tiempos. Frecuentábamos mucho el Restaurant El Pescado, la pizzería del “Tiburón” Gustavo Roque, alias Tiburón y/o Catica, un gran amigo también.

El zurdo siempre risueño, con un chiste, una ocurrencia, con su elocuencia y vitalidad muy sana. Momentos agradables y grandes recuerdos.

Llegamos a tener en la Liga LEF un equipo Súperveteranos  UCV, que era un conjunto  de estrellas o antigua estrellas del fútbol profesional de Venezuela. Por allí pasaron   Toño Marcano, José Velázquez,  Niño Mora, Gocho Martínez, Lalo Rosales, Alfredo Olivares, José Pacheco y otros tantos, pero el cerebro, el estratega, el que marcaba ritmos, era el zurdo.                                                                                                                                                   3

Hay una anécdota a raíz de su retiro definitivo como jugador ya veterano. Reinaldo tenía una lesión vieja en un tobillo, que se había calcificado y lo hacía ver de mayor tamaño que el otro. Jocosamente, siempre se refería a ese detalle, diciendo que tenía un  “aguacate” en el tobillo.  La molestia lo hizo ir a un traumatólogo y allí decidió no jugar más. Cuando le preguntamos que porque no quería seguir activo, nos respondía con su clásico y característico desparpajo: Que va Rafita, el doctor me dijo, mira vale, si tú sigues jugando fútbol, no te van a llamar mas nunca “el zurdo Rengel”, te van a decir el “cojo Rengel” y  soltaba una carcajada que era seguida por todos los que estuviésemos presentes en ese momento.

Estoy seguro que todos los que compartimos cancha con el zurdo, jugadores amateurs, profesionales, aficionados, vino tintos, caimaneros, reconocemos y no dudaríamos en afirmar  que el Zurdo Rengel era una persona especial, como futbolista, como amigo, como gente. Sin duda era un gran personaje.

 

Imagino dentro de lo desconocido que nos depara el destino, que si hay algún lugar a donde van los futbolistas una vez dejan esta vida y este mundo, que el ZURDO ya debe estar dando espectáculo y echando chistes y bromas, rodeado de muchos grandes jugadores, que alguna vez poblaron el mundo futbolístico aquí en la tierra.

Zurdo, siempre serás recordado con tu humildad, alegría y don de gente.

 

Rafa Sifontes                                                                    18.03.21

 

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