Manuel Quiroga, uno de los padres del fútbol gallego en Venezuela  

Manuel Alvarez Quiroga «Quiroguita» , aquí esta flanqueado entre Lorenzo Useche y Andres Socorro

CARACAS – La llegada de numerosos exiliados de Europa a Venezuela, a causa de la II Guerra Mundial, dio nacimiento al fútbol de colonias. Cuando estos inmigrantes se establecieron en nuestro país fundaron a equipos como Deportivo Italia, Deportivo Galicia, Deportivo Portugués, Unión Deportivo Canarias entre otros llenaban los graderíos criollos en los 40 y 50.

Nunca se sabrá, a ciencia cierta, quien fue o quiénes fueron los primeros gallegos en jugar fútbol en la tierra que vió nacer a Simón Bolívar. Lo que sí sabemos es que hay un personaje como Manuel Alvares Quiroga que atesora gran parte de la historia del Deportivo Galicia. Este inmigrante gallego tiene en sus manos más de 350 fotografías del club que representaba a la comunidad española durante el denominado fútbol de colonias.

“Cuando yo llegué a Venezuela, en 1956, tenía 20 años en ese entonces y vivía en una pensión que se llamaba Florencia, cerca de Puente de Hierro. Un amigo fue que me llevó al Centro Gallego, que en ese entonces estaba en el sector El Paraíso. Algunos años más tarde, en 1960, hubo una asamblea entre los directivos del Lar Gallego, la Casa de Galicia y el Centro Gallego donde deciden fusionarse para crear la que hoy conocemos como Hermandad Gallega”.

En 1949, un grupo de amigos gallegos “namorado” del fútbol creaba un equipo llamado Deportivo Celta, para rendirle tributo al Deportivo La Coruña y al Celta de Vigo, que eran los equipos más importantes y de mayor significación en Galicia. Posteriormente, viene la parte más importante del fútbol gallego en Venezuela, la integración del Centro Gallego y Deportivo Celta que es el verdadero origen del Galicia en 1960.

Manuel Alvarez Quiroga Secretario y el Presidente del Deportivo Galicia Gacia Morato y el Jugador Diaz

“Cuando se dio esa unión se generó un pequeño problema. ¿Qué nombre le ponemos al club? Un domingo, cuando había una fiesta con gaitas pasamos unos volantes para que los presentes votaran por el nombre del equipo. Entre las propuestas estaban Atlético Galicia, Galaico, Unión Galleguita, Sporting Galicia y Deportivo Galicia. Finalmente la gente se decidió por el nombre de Deportivo Galicia, un club que se convertiría en una polideportiva con equipos de baloncesto, hockey sobre césped, voleibol, balonmano y futbolito. Se crearon unos estatutos y hacer todos los trámites legales para poder inscribir el equipo de fútbol en la Liga Mayor ”. 

Manuel Alvearez Quiroga y Jose Antonio Alejandro ex jugador profesional del Deportivo Galicia y Secretario General de la Hermandad Gallega

El Deportivo Galícia, habría de convertirse en toda una referencia del fútbol venezolano en los años 60 y 70. Junto al Deportivo Italia, habría de dominar el rentado criollo, conquistando los títulos de los años de 1964, 1969, 1970 y 1974, consiguiendo además diversos subcampeonatos (1966, 1967, 1972, 1975, 1978 y 1979) para llegar a acumular hasta en nueve participaciones en la Copa Libertadores, haciendo que su uniforme blanco se recordara en los rincones de todo el continente. En el palmarés del Deportivo Galicia encontramos cinco títulos de la Copa Venezuela en las zafras 1966, 1967, 1969, 1979 y 1981. A escala internacional es el único equipo venezolano que cuenta con un título: la Copa Simón Bolívar de 1971. En el palmarés del club “galego” también encontramos dos títulos de la Copa Almirante Brion (1980 y 1982).

“Yo estuve vinculado al equipo sus inicios. En mi estancia con el equipo fui secretario general, después secretario de relaciones públicas y finalmente secretario de fichas. Siempre viajaba con el equipo tanto en los juegos nacionales como en los internacionales. En estos viajes comencé a recolectar las fotos de los cotejos donde estábamos involucrados. Lo que recuerdo de esas giras es que esxistía mucha camaradería con los jugadores. Uno trataba siempre de ayudarlos en todos los sentidos”.

Deportivo Galicia, luego de quedar campeón en Venezuela en 1964, debutó en la Copa Libertadores al año siguiente. Sería, el 1º de febrero de 1965, en calidad de local ante Guaraní de Paraguay y perdería 1-2. A la semana siguiente en el estadio Olímpico de la UCV recibiría la visita del Peñarol, en la cancha el cotejo terminaría 0-0, pero después el carbonero se lo adjudicaría 0-2 en la mesa por la alineación indebida de Roberto Leopardi. De visitante perdería 2-1 en Asunción y 2-0 en Montevideo.

“Recuerdo cuando viajamos a Uruguay para jugar ante Peñarol. Me encantó la ciudad de Montevideo y luego visitar un estadio con tanta historia como el Centenario de Montevideo. Recinto deportivo que había albergado la primera edición del mundial. Allí se respiraba historia”. 

 

Son tantas las anécdotas vividas por Manuel Quiroga con el Deportivo Galicia, una de ellas nos las cuenta durante la entrevista. “Durante la Copa Simón Bolívar de 1971 viajamos a Colombia. La noche previa al juego mandamos a los jugadores a acostarse temprano y dejamos encargado a un señor que cuidara las puertas para que nadie se escapara. Cerca del hotel de la concentración había un cabaret. Los directivos decidimos irnos a tomar algo allí. ¿Cuál fue nuestra sorpresa? Nuestros jugadores estaban allí. Se habían escapado por las ventanas amarrando las sabanas. Los directivos no los regañaron, ya que no podían decirles nada. Pensaron en ponerle una sanción monetaria, pero por suerte de los jugadores al día siguiente ganaron y los mandamás del Deportivo Galicia se olvidaron de la multa”.

Entre las graficas que tiene en su haber Manuel Quiroga encontramos algunas del fútbol femenino. “Un día se nos ocurrió organizar un juego entre casadas y solteras. Saltaron al terreno de juego hijas y mamás. Nosotros anunciamos ese juego con bombos y platillos. El día del anhelado partido el club estaba a reventar. ¡Todos querían ver ese juego! Después realizamos esos juegos también en el Olímpico previo a los juegos del Deportivo Galicia”.

El Deportivo Galicia jugaba todos sus encuentros como local en el estadio Olímpico de la UCV. La mayoría de sus hinchas eran españoles o descendientes de estos, principalmente de la región gallega. En aquella época eran famosos los “clásicos de colonias”  el Unión Deportiva Canarias, el Club Deportivo Portugués y el Deportivo Italia.

“La rivalidades eran fuertes, pero más que todo entre los fanáticos que asistían a los encuentros”.

En las cajas que nos muestra podemos ver fotos que reconstruyen la historia no solo de un club como el Deportivo Galicia, sino también del fútbol venezolano. Recordemos que el Deportivo Galicia también participó en el Torneo Ibérico donde también dejó una huella imborrable.

En esas graficas aparecen celebridades del balompié y de la farándula como Pelé, Alfredo Di Stefano y Mario Moreno Cantinflas.

Sin embargo, la luz del Galicia se fue apagando poco a poco. Los resultados positivos no le acompañaron desde los años 1980, la afición dejó de sentir afinidad por los colores azul y blanco y los problemas económicos empezaron a tocar la puerta en las oficinas del club. Después surgieron otros dos equipos vinculados con la comunidad gallega: Caracas Balompié subió a la primera división (1986) pero allí se cambió el nombre a Galicia de Caracas, que jugó hasta 1993. Para la Copa Bolivariana de Venezuela (2000) apareció otro Deportivo Galicia, que empezó jugando en el estadio Brígido Iriarte del Paraiso pero que en la zafra 2001-2002 terminó siendo local en Maracay y desapareció.

Fioravanti De Simone

Coordinador Editor