Iker Zubizarreta y el oro en los CAC’82: “El trabajo en equipo nos llevó a la victoria”

 

Seriado Centroamericanos y del Caribe 1982

Medalla de Oro.

“Rememorando un poco lo que fue la medalla de oro del fútbol de los Juegos Centroamericanos de Cuba’82, más allá de haber sido una experiencia inolvidable, la verdad es que el trabajo de grupo, lo que supo sustentar a aquel equipo y que nos llevó a la victoria, fue inmejorable”.

Estas fueron las palabras del atacante Iker Zubizarreta, durante su intervención, desde España donde está radicado, en el Foro montado por la Fundación Venezuela Fútbol Historia sobre los Juegos CAC’82 de Cuba y la hazaña lograda por nuestro fútbol.

 Hay que señalar que a los participantes se les pidió contestar una serie de preguntas que fueron las mismas para todos, pero cada uno respondió desde su punto de vista y en base a lo que más recordó de un hecho del que han transcurrido ya 39 años.

Sobre sus primeras palabras, recalca Iker que “eso nos lleva un poquito a la serie de preguntas que todos debemos contestarnos, y que las tiene muy bien plasmadas Luis aquí, de cómo llegamos a ser parte de aquella selección de los Centroamericanos, pues, creo que fue de una base que el profe Manuel Plasencia conjuntamente con Luis Mendoza y Pepito Hernández, quien estuvo en sus inicios también, trabajaron, fue aquella que se conformó para los Juegos Olímpicos de Moscú, de antes, de los preolímpicos en Colombia, que desembocaron en la única participación del fútbol venezolano en unos Juegos Olímpicos hasta ahora”.

Recuerda Zubizarreta que en el preolímpico Venezuela termina de cuarta, y por el llamado al boicot americano en el año 80, que fue acatado por Perú y Argentina, países que se unieron y desistieran de ir a los Juegos, “y por eso Venezuela entra como segundo en esos Olímpicos, de ahí tuvimos una muy buena base de cara a lo que se venía, que eran los Centroamericanos del 82. Esa selección definitivamente, tuvo los principales pilares, para mí, en aquella base que fue conformada durante la década de los 80, por eso para mí fue un equipo de mucha cohesión, mucha preparación, porque de alguna manera nos vimos en una continuidad de un trabajo que ya venía haciéndose en años anteriores”.

Coincide en su comentario con otros integrantes de la selección dorada de Cuba’82, al señalar que “una de las cosas bonitas que se logró hacer en aquella época, fue una preparación previa con un viaje a China, donde tuvimos la oportunidad de celebrar tres partidos previos contra equipos de primera división de allá, y la verdad es que eso nos ayudó todavía aún más a tener una preparación superior a la que habíamos tenido en épocas anteriores, y nos ayudó a estructurar la nómina de los jugadores que finalmente Plasencia y su equipo técnico decidieron llevar para Cuba, lo cual nos fortaleció y nos hizo una selección si se quiere, la más dura del torneo, que de hecho terminó llevándose la medalla de oro, y que tuvimos que enfrentar rivales importantes como México y Cuba”.

Como los otros participantes e el foto, Iker Zubizarreta también tiene recuerdos agradables y no tan agradables de esta gesta.

“Las cosas que yo recuerdo anecdóticas de nuestra participación en los Centroamericanos, que fueron si se quiere, graciosas, fueron varias, pero principalmente recuerdo que fue en la charla previa, cuando estábamos jugando la fase eliminatoria de los Centroamericanos, y nos tocaba el partido contra México, Manuel Plasencia dándonos esa cuota de inspiración y ánimos que él solo sabía dar, porque sabía llegarle al jugador, en una de sus arengas o frases, nos decía algo como “bueno jóvenes, nos vamos a enfrentar ante los mexicanos, y la verdad es que a los mexicanos no hay que temerles, porque son pequeños y cagones”.

Pero en la cancha era todo lo contrario.

 “Bueno, no pudo ser más contraria esa afirmación, que cuando nos vimos en el partido contra los mexicanos que finalizó en una bochornosa tángana, y vimos que lo último que eran los jugadores de México era pequeños y cagones, en mi caso específico, que me desempeñaba en la posición de centrodelantero, pues la verdad, el mexicano que me marcaba era más alto que yo, y el cagón lo tenía muy lejos. La situación se tornó bien compleja en un partido verdaderamente tenso, que lamentablemente como dije, terminó en una tángana, y nos las vimos chiquitas contra los mexicanos, jugadores y público”.

Sobre esto agrega que “esa fue una de las anécdotas que recuerdo más vivamente y que en mi caso personal creo que aunque la pasamos muy mal en el momento, fue chistosa porque me quedó muy viva en la mente, y hoy en día la rememoro así”.

Un recuerdo ingrato para el centrodelantero venezolano fue su lesión en la final.

“También lo que recuerdo es cuando ya nos toca enfrentar la final contra México, lamentablemente yo me lesiono por el calentamiento previo, sufro un tirón porque tuve la mala suerte de hacer un pique muy violento empezando el partido, y debí pedir cambio, porque simplemente no tuve la suerte, y no recuerdo quien ingresó para sustituirme, pero bueno, la selección se desempeñó en forma admirable, una destacada actuación de Cherry Gamboa, y un balón que se encuentra Añor después de una buena jugada de Cherry, concretamos el gol y logramos la victoria y la medalla de oro de los Centroamericanos”.

No escapó para el jugador la realidad que se viví en ese momento en Cuba (y aún hoy en día), y de la cual no permitían que las delegaciones se enteraran.

“La verdad es que para mí fue una vivencia muy intensa, algo inolvidable lo que vivimos en aquella Cuba de los primeros años de los ochenta, donde solo nos llevaron a ver, obviamente, todo lo que el gobierno de ese tipo en aquel entonces y que sigue siendo el mismo de ahora, quería que viéramos, sin poder ver los detalles de todas las circunstancias mediocres que estos gobiernos izquierdistas implantan en sus países para de esa manera tener subyugada y dominada a su gente”.

Volviendo al torneo agrega que “en aquel momento lo que teníamos simplemente era una condición física espectacular y una cohesión inmejorable, y pudimos estar en el mejor centro deportivo que para ese momento Cuba tenía, pero bueno, fueron cosas muy hermosas que aquel grupo pudo vivir, aquel grupo de futbolistas que pudimos convivir durante tanto tiempo, y no hay nada mejor que después de tanto tiempo de sacrificio, logres llegar y conseguir la meta que te propones, que era esa, la medalla de oro de los Centroamericanos”.

Como colofón a su intervención lamente Iker que con tanto talento y condiciones que tiene el futbolista venezolano, no se haya podido hacer aún más.

“La verdad es que para mí fueron momentos de mucho crecimiento y desarrollo profesional y futbolístico, nada más puedo señalarle a mis compañeros que hoy rememoran esa gesta, que Venezuela tiene obviamente el talento, tiene los jugadores como todo, simplemente nos tenemos que organizar para que las estructuras dentro del país logren hacer los cambios necesarios, para que podamos exaltar la condición futbolística que siempre nos ha destacado”.

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